miércoles, 13 de junio de 2007

En recuperación


Después de haberme ido a atender mi muela ultrapulverizada el lunes de la semana pasada, pensé que ya había terminado el suplicio, pero no fue así. Debido a que la pieza dental estaba totalmente fracturada desde un principio, el doctor del centro de salud, extrajo lo que a simple vista se veía. Con el paso de los días, sentía ligera molestias y me chequé a conciencia la parte afectada. ¡Oh, no! Se había quedado un pedazo de molar sin extraer y lo que es peor, la herida ya estaba cerrando y el mentado "cacho de muela" se estaba quedando adentro.
Esto fue, ¡sí, el fin de semana! ¿por qué las desgracias siempre tienen que ocurrir los sábados ya por la tarde o en pleno domingo? Así que con el temor de que volvieran a aparecer intensos dolores (afortunadamente no fue así) esperé hasta el lunes para ir a ver al dentista al centro de salud y decirle lo que me acontecía.
Él, como todo un profesional, me dijo que se había quedado esa astilla adentro debido a que ya así estaba desde hace más de un mes que se me fracturó. Que para haberlo visto hubiera sido necesario una radiografía, cosa que no hicimos, pues yo pensé que con extraerla se acabaría el problema.
Para no extenderme mucho, hubo necesidad de hacerme una cirugía. Todo fue, como ya se está haciendo costumbre, de lo más profesional. Un poco de dolor a la hora de extraer el pedazo de raíz incrustado en lo más cavernoso de mi encía inferior. De ahí en fuera, nada que me pusiera a sufrir el día de ayer. No hubo el más mínimo de sangrado, mas que el natural (10 min). La cicatrización hasta la mañana de este día va al cien por ciento. No me duele nada, no siento molestias y ya tengo mucha hambre. Creo que estoy listo para comerme unas deliciosas "tostadas con mucho chile seco"
Nuevamente gracias a las personas que me han atendido en forma tan profesional.
Maese